Notario 52
Bogotá D.C., Colombia
Homenaje a Luis Gómez, el último gran juglar de la Música Campesina Cubana, en los 100 años de su natalicio (Enero 22 de 2018)
La décima, la composición literaria formalmente más exigente, ha sido cultivada en toda Hispanoamérica. Su estructura métrica de diez versos octosílabos (con licencia para sinalefas y sinéresis que permiten versos de 7 o 9 sílabas), son un imperativo categórico: Su complejidad radica en el formato de sus rimas, en el que los versos 1- 4 y 5 deben coincidir, así como el 2 con el 3, el 8 con el 9, y los 6-7 y 10: abba accddc. Además, solo puede haber pausas después del cuarto verso, pudiendo ser adornadas con repeticiones de la primera frase.
También se le conoce en España y Brasil como Espinela, en honor al poeta Vicente Espinel (s. XVI), quien se inventó semejante estructura. Y qué orgullo ver cómo viejos juglares nuestros llegaron a dominarla en nuestro país (Gabriel Segura, decimero soledeño, Gabriel Escorcia Gravini, también de ese municipio (La gran miseria humana), Daniel Lemaitre, cartagenero, Pedro María Gil en Betulia, Adolfo Pacheco, y muchos más).
Rindo un homenaje, al –para mí- monstruo de la Décima cubana de los últimos 60 años: LUIS GÓMEZ, el último poeta nacional, cuyo natalicio acaba de celebrarse. Este gran improvisador y repentista nació en Cumanayagua un 22 de enero de 1918 y murió en Cienfuegos el 26 de mayo de 2001.
Tomado de Youtube
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En Cuba (en Colombia es empleada en piquerias, contrapuntos, trovas paisas, música sabanera y vallenata), tuvo gran arraigo después de su proceso de transculturación y aún hoy se conserva y difunde, gracias al Centro de Investigación y Desarrollo de la Música Cubana, cuyo ejemplo de “intraculturación” e “interculturación” debería seguirse en estos lares. Allá tienen abundante literatura dedicada a esta forma poética, porque para los cubanos la DÉCIMA es una “Marca”, un signo de identidad. Define la “Cubanía”.
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Amante de los gallos finos, esta temática la empleó recurrentemente y se consagró como un exponente del animismo cubano, tan ligado a su raigambre cultural. Repentista como pocos, su genio hallaba expresión con tan pocos contendores.
LUIS actuó en varias películas, entre ellas Juan Quinquín en Pueblo Mocho. Nunca dejó su guitarra y eran su fuerte las tonadas, por lo que fue llamado Rey de la Tonada Carvajal, que tuvo su origen en Asturias y fue un poeta español de apellido Carvajal quien la popularizó.
Silvio Rodríguez, de quien el poeta decía que era como su hijo, en 1989 le dijo: “Luis, si yo pudiera hacer la décima que tú haces, me inmortalizaría”.
Hacía un programa radial en vivo, en el que respondía con décimas al aire, piés forzados que los oyentes le ponían. En una ocasión el entrevistador le dijo que definiera su vida:
“Medio siglo llevo yo
de estudio centinela,
y medio más que la escuela
de la vida me enseñó.
El pasado me dejó
inmensa filosofía,
y sé de la sierpe impía
que astuta se desenrosca,
y no hay sabio que conozca
como yo de la poesía.”
Bogotá, enero de 2018
En este enlace podrán ver un documental sobre Luis Gómez: